Posted marzo 26, 2022

2022 03 26

PAPERS / ESCRITORIO DE ANTONIO VIUDAS CAMARASA

del libro en redacción LUIS CHAMIZO Y SUS CIRCUNSTANCIAS

Por Antonio Viudas Camarasa

1934 Antonio Elviro Berdeguer, socialista, defensor de la clase media española en El Radical de Cáceres

1934 05 10 Antonio Elviro Berdeguer: La clase media española, artículo publicado en El Radical de Cáceres, periódico dirigido por el Catedrático de latín, Martìn Duque Fuentes, presidente del Partido Radical de Cáceres

Edición de Antonio Viudas Camarasa

Documentación de Carlos Baena García

Este artículo formará parte del APÉNDICE DOCUMENTAL DE LUIS CHAMIZO Y SUS CIRCUNSTANCIAS

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«Hace tiempo y con motivo de justa y obligada exaltación democrática, afirmamos que la clase media española no podría ser considerada ni como clase ni como media» (Antonio Elviro Berdeguer, El Radical de Cáceres, 1934)

«… que en las aldeas y pueblos vive labrando sus heredades para más tarde verter el caudal de sus sacrificios, el penoso calvario de todo un año de martirios en las garras sedientas de la usura…» (Antonio Elviro Berdeguer, El Radical de Cáceres, 1934))

1934 0510 El radical de Cáceres: La clase media española por Antonio Elviro Berdeguer

LA CLASE MEDIA ESPAÑOLA

Hace tiempo y con motivo de justa y obligada exaltación democrática, afirmamos que la clase media española no podría ser considerada ni como clase ni como media. Pesan sobre este aglomerado social los impuestos y tributos oficiales en cuantía superior a sus esfuerzos económicos y que más tarde el Estado impone un 20 por 100 de recargo al no poder satisfacer puntualmente sus bases contributivas con una usura feroz y despiadada; pesan sobre ella el hambre de aquellos pobres de corbata y levita que no pueden arrastrarla por el ambiente púlico, sino sufrirla calladamente entre el dolor de los suyos; pesan sobre ella en suma, los máximos dolores de la injusticia social, cuando de su cantera inagotable surgen hombres guiones de la cultura patria, hacen distas insignes, proletariado intelectual resignado a producir hijos ilustres sin el premio merecido a sus esfuerzos históricos. La clase media destrozada, esclavizada a vergonzosas servidumbres no tuvo el arresto de una heroicidad que defendiera sus propios prestigios constituyendo un conglomerado que hiciera frente a las trágicas vicisitudes de los tiempos presentes. Resignó su poderío espiritual a la oficina, a la profesión libre, a la artesanía con aires de tecnicismo plástico, nutriendo en el arte, la ciencia y la industria las fuentes maravillosas del progreso humano.

La situación social no acusa individualidad colectiva definida. Entre las clases españolas, la clase media encuentra ramificaciones extendidas por las distintas actividades del país, base de la falta de cohesión y de espíritu de clase. El obrero lucha con un ideal firme, las entidades patronales crean líneas de conducta defensivas, mientras que esta sufrida clase social en su amorfismo a veces se infiltra en las humildes capas sociales como se sitúa otras entre la aristocracia del talento sin beneficio inmediato propio, viviendo del recuerdo de pasadas grandezas sepultadas en el agrietado panteón de la historia.

Podemos afirmar que la clase media sufre una honda crisis espiritual y financiera, que este importante sector de la vitalidad española con sus falanges de médicos, abogados, artistas, oficinistas, etc., cruza una existencia penosa con injustos agobios de dinero, acribillada de impuestos, viviendo del crédito usurario, explotada en las grandes ciudades como esclavos del taller y la oficina en aras del cumplimiento de un deber excesivo bajo la férula de modernos traficantes, que en las aldeas y pueblos vive labrando sus heredades para más tarde verter el caudal de sus sacrificios, el penoso calvario de todo un año de martirios en las garras sedientas de la usura, que solo espera el final de su cosechas para apoderarse de los trigos y animales apenas criados con el dolor y esfuerzo sobrehumano propio, que es la carne de las hipotecas vergonzosas donde se alimenta la piratería holgazana del siglo presente. Esta clase media con sus esfuerzos produce enormes ganancias en los negocios industriales con la audaz inteligencia del técnico que ardorosamente se sacrifica en aras de la empresa que le confirió alta dirección en sus explotaciones, constituye la alta espiritualidad de los partidos políticos y de la gran prensa con el producto de sus esfuerzos intelectuales,

¿Solución práctica para su mejoramiento social y económico? Existe en el mundo una fuerza única, positiva y precisa que pueda luchar enfrente del olvido y la injusticia social, y esta fuerza se resume en la sólida cohesión de sus individuos. Un frente único en todo el ámbito nacional que una a los hombres. modestos agrupándolos para estudiar fórmulas de mejoramiento colectivo, bases o ponencias que tiendan a la resolución de sus hondos problemas económicos y sociales, que en el laboratorio de sus actividades surjan ideas nuevas por el progreso patrio y elevación espiritual de sus componentes. Secciones de burocracia, secciones de técnicos, secciones de las distintas fuerzas vivas del país con los variados matices donde vive la mesocracia, asambleas provinciales, todo un vasto programa de reivindicaciones justísimas que pueda marcar nuevas rutas abriendo paso a una humanidad trabajadora que solo anhela redimirse de despóticas tiranías.

ANTONIO ELVIRO BERDEGUER

Salorino y Mayo de 1934.