- 2020 11 15
Carta al despoblado de Rocafort en La Litera
Antonio Viudas Camarasa
Fragmentos de la vida de un extremaño
Querido despoblado Rocafort:
Ha sido una lástima que lo políticamente correcto haya impedido el que defendiéramos los valores de La Litera frente al catalanismo activo. Resultado: estoy en una novela de tono subido de un activista y sigo defendiendo lo nuestro. Ni dirigentes políticos (ninguno), ni universitarios activistas (que se mueven en nombre de la ciencia falseando su investigación) nos han dado nada a la comarca de La Litera. Cinco personas supimos defender lo nuestro. Otros se alinearon en el posmodernismo acomodaticio catalanista y en el activismo de quienes inventan un aragonés coiné que no habla nadie. Las asociaciones y los activistas ribagorzanos que comen más allá de La Clamor de Almacellas consumieron la paja del pesebre.
Ahora tal vez el pesebre esté vacío y la bullanga es más débil. Los partidos políticos de Aragón no han sabido defender los derechos lingüísticos de los aragoneses de frontera. José Antonio Labordeta, mi admirado cantautor, también estaba equivocado. Me dan pena los escasos intelectuales de Aragón de la segunda mitad del siglo XX que no supieron entender qué éramos la gente de Frontera.
Como un ejemplo, la posición del periodista (hombre público y mediático) Manuel Campo Vidal mejor ni hablar. Supo defender lo suyo y subir escalones. La historia, la verdad y los hechos pondrá a cada uno en su sitio. No debo olvidar que mi madre Joaquina era de Casa Kiló de Camporrells, con antepasados de Casa Martí de Estaña. Mis ocho apellidos aragoneses proceden ex aequo por parte materna de Camporrells y por parte paterna de San Esteban de Litera. Apellidos de frontera al cincuenta por ciento. Antonio Viudas Camarasa Escuder Torres Mayós Quintilla Pena Benabarre
Con Josep M. Espinàs estoy muy agradecido porque hago mío el pensamiento de Mafalda: » A mí me da igual que la gente no piense igual que yo… a estas alturas con que piense me conformo». Tengo el libro de Espinàs A peu per la Llitera. Viatge a la frontera de la llengua (1990) («A pie por La Litera. Viaje a la frontera de la lengua») dedicado con mucho respeto y cariño «Per a Antonio Viudas, esperant saludar.lo algún dia, aquest petit homenatje á La Llitera. JMEspinàs» (Para Antonio Viudas Camarasa, esperando saludarlo algún día, este pequeño homenaje a La Litera. JMEspinàs). Literariamente hablando me halaga el que en las páginas 66 y 67 dedique unas líneas a mi persona en 1990 con mis 41 años recién cumplidos, que valoro el castuo, el extremeño, y que he publicado diversos textos sobre el habla popular de la Litera. Me cita de esta manera: «En la seva opinió, la parla de La Llitera pertany a una de les varietats del dialecte ribagorçà» (en su opinión, el habla de La Litera pertenece a una de las variedades del dialecto ribagorzano».
El Centro de Estudios Literanos se cargó, coloquialmente hablando, la mejor revista que ha tenido la comarca: LA VOZ DE LA LITERA, al eliminar la voz popular en ribargorzano.
Di a conocer La Litera, esa gran desconocida, con mis estudios iniciales. Me siento contento porque por fin estoy recuperando la Vecindad Aragonesa, que perdí porque un juez de paz me echó de su despacho hacia 1978 cuando fui a expresar mi deseo de no perder dicha vecindad y acogerme a ella, como aragonés de nacimiento y sentimiento.
A Aragón solo lo podemos defender los aragoneses de los ataques continuos de activistas vecinos. Las lenguas minoritarias de Aragón es evidente que serán fagocitadas por la desunión entre los pseudointelectuales posmodernos que han manejado el cotarro en estos cuarenta últimos años, desde 1987.
Lo mediático es pasajero. La Universidad de Zaragoza nunca como institución ni se ha implicado, como tendría que haber hecho, ni ha dicho jamás nada. Activismo de partido al servicio de la Nada.
¿Qué escritor aragonés del círculo del poder y de las capillas de literatos ha destacado fuera de la región?
Fuera somos conocidos por muy pocos artistas y escritores de renombre suprarregional: Labordeta, Los Titiriteros de Binéfar, Soledad Puértolas, Luz Gabás (escritora que ha ido por libre) y ahora Manuel Vila, espora aislada de Barbastro. La lista se puede completar, pero no en exceso.
¿De qué ha servido tanta feria del libro aragonés para promocionar la proyección universal de la producción aragonesa fuera de los límites fronterizos internos?
Un fuerte abrazo de
Antonio Viudas Camarasa